Club Fútbol Sala Riba-Roja
HISTORIA DEL CLUB
El fútbol sala es un deporte nacido en latino-américa alrededor de 1930, que llegó a nuestro país bastantes años después. No sin pasar por bastantes visicitudes, en la decada de los ’80 comenzó a tener una estructura profesional y unificada y desde entonces su crecimiento ha sido constante. Avalado por siete campeonatos de Europa y dos campeonatos del mundo, nuestro país es referente mundial en este deporte.
A la par de este crecimiento a mediados de los años ’80 en Riba-roja se formaron distintas escuelas municipales deportivas. El fútbol sala amparado en la Concejalia de Deportes, siendo por entonces concejal del área D. Francisco Soriano, comenzó su andadura oficial en 1988 con la aprobación de sus estatutos, necesarios para inscribirse en las competiciones de fútbol sala de la Federación deportiva del mismo nombre. Todo ello teniendo en cuenta que en nuestro pueblo la popularidad del deporte era grande, sobre todo en la celebración de unas competiciones estivales bajo la denominación de Semana Deportiva donde alrededor de 300 participantes practicaban y competían en las pistas del Polideportivo Municipal por ganar un prestigioso torneo comarcal. La realidad es que esta afición se trasladaba de manera minima al resto de la temporada ya que unicamente se contaban con dos o tres equipos federados; el equipo amateur, infantil y juvenil. Pero eso sí, a nivel escolar participaban los cuatro centros escolares existentes entonces (bajo la denominación actual: Colegio Asuncion Nuestra Señora, CEIP Cervantes, CEIP Mas d’Escoto y CEIP Eres Altes).
A partir de 1990 se produjo un importante impulso del deporte sobre todo en los equipos en categoría amateur en las competiciones territoriales primero y en las competiciones inmediatamente inferiores a la liga profesional después – 1ª Nacional «A», 1ª Nacional «B» convirtiendose Riba-roja en el referente del fútbol sala valenciano de la época. Con un componente de jugadores provinientes de fuera que dotaban de calidad al equipo, coincidiendo con la inauguración del Pabellón Municipal, de los mejores de la Comunidad Valenciana de aquella epoca e incluso actualmente es un referente.
Al desaparecer la tutela y control del Ayuntamiento, el club inicio una andadura autonoma ligada a la capacidad, trabajo y entrega de los gestores de aquel momento. Se trabajaba poniendo el empeño en las categorias amateurs y con dificultad en la creación y consolidación de la escuela deportiva.
Bajo ese formato, y con la popularidad que seguia habiendo del fútbol sala; llegandose a jugar en el recien inaugurado Pabellón Municipal una liga local aficionada de hasta 12 equipos compitiendo de lunes a viernes en horario nocturno (a partir 21:00), aprovechando que la actividad deportiva de Riba-roja de Turia era poco menos que incipiente. Todo ello congregaba gran numero de aficionados que posteriormente no se veia reflejado en el club, pero si fue positivo para la creación de un equipo amateur femenino que paso desde su formación y en breve periodo de tiempo a alcanzar tres fases de ascenso a División de Honor, titulos provinciales y autonomicos manteniendose en activo cerca de 8 temporadas y siendo un gran soporte para el club y su promoción.
El agotamiento personal, la falta de relevo en la gestión, las dificultades en el crecimiento llevaron: en primer lugar a la disolución del equipo femenino y posteriormente el equipo masculino paso de competir an altas categorias nacionales a categorias territoriales.
Sin tener consolidada una escuela y con esos procedentes la andadura del fútbol sala a nivel local fue pasando sin pena ni gloria a lo largo de los años.
Hace aproximadamente diez temporadas se produjo una refundación del club en el sentido de creación de un grupo de personas que habia estado vinculada al club como jugadores que apostaron por un nuevo modelo donde se priorizaba la formación de una escuela y donde se tenia claro que se tenia que tener un equipo referente en categoria amateur para verse reflejado en ellos.
Se compitió nuevamente en Tercera División nutriendose en gran manera de jugadores foráneos pero con el objetivo puesto en la formación. Se creo una escuela deportiva en los colegios (Asunción, Eres Altes, Cervantes) para llegar en categoria infantil al club. Este proceso derivo con posterioridad a tener en la competición federada a todas y cada una de las categorias de formación y desde 2014-15 no ha habido temporada en que algún equipo del club no haya conseguido triunfos deportivos desde benjamines a juveniles de lo cual nos sentimos muy orgullosos y máxime cuando a su vez el equipo amateur se ve nutrido por jugadores de la escuela con un peso específico bastante importante.